domingo, 16 de mayo de 2010

Un secreto




Supongo que así como este espacio me ha servido y ha acogido mis mayores penas, hoy se merece que le cuente todo lo maravilloso que estoy viviendo en este momento.
Confieso que desde que lo conocí él no ha hecho otra cosa que llenar mi vida de felicidad. Siendo que la primera vez que salímos, si bien no lo miré con otros ojos, sólo con una agradable junta arregló una semana que había sido de la puta madre.
Aún no sé bien cómo sucedió, o cómo se dio todo esto, pero volver a juntarnos se hacía una necesidad.
Recierdo estar en tu habitación, viendo una película cuando me pediste que te besara. Yo dije que no y nunca te dije por qué. En ese minuto el secreto era que quería dartelo para tu cumpleaños, aunque en ese minuto lo deseaba tanto como tú. El resultado, me fui a quedar contigo esa noche... Subimos a los quinchos, me estabas mostrando donde ibamos a celebrar tu cumpleaños número 26, cuando de pronto estabamos mirando la ciudad y me besaste, no pude hacer otra cosa que corresponderte...
Así llegó tu cumpleaños, conocí a tus amigos, bebiste... mucho y al otro día, aunque ya habías mencionado que querías estar conmigo y ese tipo de cosas, luego de tu ducha llegaste a la pieza me miraste te arrdillaste y me pediste que estuvieramos juntos, dicho en el buen shileno: "pololeo". Te respondí que sí, mientras tú seguías hablando y cuando te diste cuenta de mi respuesta no atinaste a otra cosa que decirme: "¿En serio?", a lo que te volví a reiterar que sí.
Oficialmente llevamos una semana y dos días, pero admito que desde aquel día que nos besamos mi mundo cambió completamente. Lo único que tenía en la mente era egresar y el amor completamente descartado, pero apareciste tú y hoy, a pesar de lo poco que llevamos siento que no podría vivir sin ti, que no quiero estar sin ti.
Nunca pensé que iba a volver a sentir algo tan hermoso y grande por alguien, la verdad algo que nunca había sentido. Todas esas cosas tu las sabes, me basta con eso, así que todas esas cosas me las reservo para nosotros dos.
Lo que sí les confesaré, es que no sólo me siente inmensamente feliz sino que con él, mi compañero, me siento una mujer plena.
Estaba pensando en la noche del viernes, donde salimos a comer, fuimos a la discors -KMASU, muy mala por cierto- y llegamos a tu depa. Nos fuimos al tuto time -como dices tú-, pero antes de eso me dediqué a acariciar tu piel y besarte un buen rato... parecía que el tiempo se había detenido y todo el ruido de la ciudad, aún estando en pleno centro de Santiago, había desaparecido... y es que, aunque tengo todas mis cosas claras y mis pies en la tierras, tú me tienes en las nubes. Me hace volar y tocar el cielo con una sola sonrisa, sacas todo lo mejor que hay en mí... Haces que mi mundo se convierta en uno que quiero construir junto a ti.....

pd: disculpen si hay algún error de tipeo o falta de otrografía... esto esa salindo ultra, mega recién del horno y quiero que mantenga su esencia, como es la idea de este espacio.